INTRUDERS (SHUT IN)

ESTADOS UNIDOS, 2015

TÍTULO ORIGINAL: Intruders (Shut In)

DIRECTOR: Adam Schindler

PRODUCTOR: Erik Olsen, Jeff Rice

GUIÓN: T.J. Cimfel, David White

REPARTO: Culkin, Beth Riesgraf, Jack Kesy, Leticia Jiménez

DURACIÓN: 90 minutos

WEB: 

IMDB: http://www.imdb.com/title/tt4009278/

VALORACIÓN: 7/10

EN LA BOCA DEL LOBO

Anna es una mujer que sufre una agorafobia que la paraliza por completo. Por eso, cuando tres delincuentes irrumpen en su hogar, Anna no huye. Lo que no saben el trio de malhechores es que la agorafobia no es su única psicosis.

Intruders comienza como lo haría cualquier cinta del subgénero Home-Invasion: nos presenta a una protagonista y su precaria situación (su hermano acaba de morir víctima de un cáncer) y sin irse demasiado por las ramas nos mete de lleno en el meollo cuando en pleno día y sin apenas presentación, tres desconocidos se cuelan en su casa sin saber que ella está dentro. Hasta aquí, todo es de sobras conocido y no augura precisamente que estemos ante un título demasiado original, pero es justo ese falso sentimiento de normalidad lo que juega más a su favor. Y es que, en Intruders (o Shut In, ambos títulos rondan por la red), lo único común que encontraremos más allá de la premisa, serán los 3 delincuentes.

El punto de arranque en el que empieza realmente la verdadera película, es cuando Anna, que así se llama la protagonista, poco después de ser invadida y tenga la oportunidad de salir corriendo, para nuestra sorpresa, se queda plantada frente a la puerta abierta. Aquí queda claro que a parte del luto, Anna sufre también de agorafobia, o lo que es lo mismo, le es imposible salir de su propia casa ni cuando su vida está en claro peligro. Los maleantes, sorprendidos por su reacción, se aprovecharan de ello y comenzaran un juego del que Anna solo podrá ganar enfrentándose a ellos ya que para ella huir no es una opción. Por si esto fuera poco, nuestra protagonista esconde algún que otro secreto que según vaya saliendo a la luz dejara claro que ni ella es una víctima cualquiera ni la casa en la que se refugia es tan común como parece a simple vista.

Como digo muchas veces, hay películas de las que es mejor no ver avances ni trailers (incluso evitar leer las sinopsis ayuda en algunos casos) y esta es una de ellas. No quiero ser yo el que os desvele parte de la gracia más allá de lo poco que ya he dicho, así que resumiré Intruders como un home-invasion que pese a comenzar en los lugares comunes que todos conocemos y hemos visto en multitud de títulos, según pasan los minutos va cogiendo fuerza y mostrándonos su verdadera personalidad, haciéndonos participes del juego en el que terminan metidos todos los personajes y manteniendo el suspense en la mayor parte del metraje. El ritmo una vez arranca no decae y en ningún momento sentí que hubiera minutos de relleno ni escenas sobrantes, casi todo lo que ocurre es necesario para ir desvelando los puzles que son la personalidad de Anna y la misteriosa casa que usa a modo de fortaleza.

El clásico juego del gato y el ratón aquí coge un rumbo diferente y eso es de agradecer después de la multitud de cintas que hay con esta misma premisa. Sí es cierto, que aunque la cinta te mantiene pegado y sacando conclusiones casi todo el rato, tanto la resolución como el desarrollo son bastante sencillos, es decir, que aunque el suspense esta ahí y queremos saber más, a medida que vamos descubriendo de que va el asunto se nos pueden venir varios títulos a la cabeza (las referencias a You're Next, Saw y hasta I Spit On Your Grave son bastante evidentes) pero no veo esto como algo negativo ya que en todo momento la película sabe mantener su tono, si dejarse llevar por los títulos que he nombrado y jugando en su propia liga. En aquellos la violencia y la sangre eran uno de los ingredientes principales de la función, limitándose aquí a momentos puntuales, apostando más por mostrar el lado psicológico de los personajes (y sus motivaciones) antes que sus órganos esparcidos por el suelo.

No es una cinta con grandes alardes, tanto la fotografía, como la dirección y la banda sonora, sin ser malas (ni mucho menos) están libres de aspavientos, recayendo toda la fuerza en el guion y sus personajes, interpretados todos correctamente y destacando a una misteriosa y versátil Beth Riesgraf (conocida por la serie Las Reglas del Juego) como Anna, que va de un lado a otro mostrando todos los matices y capas necesarias para que el personaje tenga sentido y a la vez, mantener siempre cierta intriga en su comportamiento. Poco más puedo decir ya que correría el riesgo de spoilear demasiado y creo que lo mejor es que os sentéis a verla y saquéis vuestras propias conclusiones, pero en general creo que Intruders es un buen ejercicio de suspense que sabe jugar bien sus cartas y pese a tocar temas que ya hemos visto otras veces, sabe mantener la intriga durante sus 90 minutos y cerrar bien su propio juego, siempre como ya digo, desde la sencillez libre de alardes.

Lo mejor: El buen hacer de su director a la hora de tenernos pegados y dándole vueltas a lo que está pasando para ir dejándonos pistas poco a poco hasta que nos lo explica. Sin ser una resolución totalmente original o diferente a otras películas, si se siente fresca respecto a otros títulos del mismo subgénero. El ritmo no da pie al aburrimiento y sus golpes de efecto están bien repartidos durante sus 90 minutos. Las motivaciones del personaje de Anna son bastante interesantes y la actriz resuelve bien la difícil papeleta de hacerla creíble en todas sus facetas.

Lo peor: Como ya he dicho, la cinta intriga y atrapa pero los temas que termina tratando no dejan de estar ya vistos anteriormente así que si buscáis EL FINAL con mayúsculas igual os quedáis un poco decepcionados. Creo que lo importante de la cinta es su desarrollo y el mantenimiento del suspense, que hace que estés todo el rato pensando e intentando sacar conclusiones, al margen de la resolución que sin salirse de tono, para lo más curtidos en este tipo de historias puede ser algo predecible, aunque por suerte no fue mi caso.