“Nunca seremos tan especiales como soñábamos cuando éramos pequeños. Este es el chasco que se llevan Warren y Spencer, dos chicos de clase media sumidos en el desencanto de la vida común y que se rebelarán contra el sistema planeando un robo... a una biblioteca de instituto. El director de El impostor, uno de los documentales más fascinantes de la última década, da el salto a la ficción basándose en un hecho excéntrico pero real.”
Como bien dice la presentación que le han hecho a la American Animals en el festival de Sitges, El Impostor es uno de los documentales más fascinantes de la última década, una obra que no dudo en recomendar cuando tengo la oportunidad y que supuso mi primer contacto con el director Bart Lyton.
Lo primero que quiere dejar claro en su nueva obra es que no es una historia basada en hechos reales, si no una historia real. Lyton mezcla ficción y documental para recrear el robo de unos valiosos libros perpetrado por un grupo de universitarios estadounidenses. Un robo que acabaría arruinando la vida de unos jovenes con un prometedor futuro por delante.
American Animals acaba convirtiéndose en un típico thriller perfectamente hilvanado tras sus múltiples capas de entrevistas y ficción y sus saltos temporales.
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