REINO UNIDO, 2015
TÍTULO ORIGINAL: Hangman
DIRECTOR: Adam Mason
PRODUCTOR: Adam Mason, Jeremy Sisto
GUIÓN: Simon Boyes, Adam Mason
REPARTO: Jeremy Sisto, Kate Ashfield, Ty Simpkins
DURACIÓN: 85 minutos
WEB:
IMDB: http://www.imdb.com/title/tt4441422/
VALORACIÓN: 5.5/10
GRAN HERMANO VIP 2.0.
La familia Miller regresa de vacaciones y se encuentra que alguien ha entrado en su casa a robar. Después de limpiar todo el desastre y continuar con sus vidas, seguirán con el sentimiento de miedo en su cuerpo. Sin embargo, lo que no saben, es que su vida está a punto de convertirse en una pesadilla...
¿Alguna vez os habéis descubierto, casi sin daros
cuenta de cómo ni saber muy bien el por qué, mirando hacia la ventana del
vecino? Estoy seguro de que sí. Todos
tenemos en el fondo una pequeña parte voyerista y la saquemos más o menos, está
claro que uno de los deportes nacionales (y en el mundo entero realmente) es
meternos a mirar en las vidas de otros. Solo así se entiende que cada país
tenga su versión de Gran Hermano y
bata los records de audiencia que bate. De por si el cine no deja de ser otra
expresión del lado voyeur que todos tenemos dentro. En mayor o menor grado, nos
gusta mirar y a ser posible, sin ser vistos.
Hangman es una
título que, bajo esta ideología, nos presenta lo que podría ser cualquier found footage que sigue el esquema de “familia perfecta es acosada por un loco que
pone cámaras en toda su casa” y aunque superficialmente eso es todo lo que
veremos en ella, creo que la manera en que nos sitúa en el lado del acosador la
hace un poco diferente a otras propuestas que tratan el mismo tema. El
argumento es tan simple que por no encontrar, no he encontrado ni una sinopsis
oficial (hay bastante poco de esta cinta por internet) pero digamos que este
hombre se dedica a fingir robos en las casas para, con la excusa de que la
puerta esta forzada, instalar cámaras y controlar absolutamente todo lo que
ocurre desde su escondite. Vamos, como un reality
pero con la peculiaridad de que sus protagonistas no lo saben y que no hay Súper
ni tampoco Mercedes Milá, si no
alguien bastante más peligroso y sobretodo, paciente.
Una de las cosas que me han llamado la atención de Hangman es que aquí solo vemos a las
victimas desde los ojos del acosador; nunca ocurre algo que no esté siendo
visto también por él, cosa que si ocurre a la inversa. Pocas veces en este tipo
de films y mucho menos en este formato uno ve lo que hace el malo cuando nadie
le ve, más bien se aprovecha su omnipresencia para despistarnos de por dónde
aparecerá o que hará, cuando aquí lo sabemos de antemano, pero impotentes no
podemos hacer más que mirar y esperar a que ocurra. Eso sí, una de las cosas
que hay que tener claras antes de sentarse a ver esta película es que la
paciencia y la calma son los ingredientes principales del “experimento” cinematográfico.
No veremos carreras frenéticas, movimientos de cámara confusos, gritos
despavoridos ni situaciones difíciles de entender pero esto tiene un precio a
pagar: el desarrollo de la historia.
La cinta de Adam
Mason no tiene ningún interés en contarnos algo realmente relevante o
aterrador, de por sí, no tiene interés en contarnos nada. Lo que realmente
quiere (o eso he percibido yo) es que te sientas como el acosador, tan
enganchado a seguir mirando que sin darte cuenta, te veas a ti mismo dándole
vueltas a los problemas cotidianos de la familia entrando de esa manera en el
juego que te propone. No quiero decir que no ocurre nada de nada, algo hay
obviamente, pero si entras pensando en ver como la familia es masacrada y
torturada por el psyco-killer de
turno te morirás esperando. Esto es un arma de doble filo, ya que uno de los
puntos más flojos es esa falta total de chicha,
que por muy aposta que esté hecha y por mucho que cumpla con el cometido que se
buscaba, a ratos se hace insufrible la sensación de estar viendo una nada
constante. Si és cierto que estos momentos se ven compensados cuando el
acosador hace sus apariciones, siendo estas las que más impactan por su
sencillez y naturalidad a la hora de mostrarlas. No es tanto lo que hace (que
excepto al final, son tonterías más para dar paranoia que otra cosa) si no como
lo hace, la manera en que les mira dormir o como se mueve sin hacer el más
mínimo ruido incluso en pleno día y con la casa al completo. Eso és lo que
realmente incomoda de Hangman y lo
que la hace destacar.
Otra cosa que me llamo la atención es el reparto
lleno de caras conocidas, algo que no es lo normal en este tipo de títulos por
eso de darle más credibilidad a los hechos. Jeremy Sisto (Six Feet Under),
Kate Ashfield (Shaun Of The Dead), Ty
Simpkins (Jurassic World, Insidious)
y su hermana en la vida real, Ryan
Simpkins, son los integrantes de esta familia e incluso hay un pequeño
(minúsculo) cameo de Amy Smart. Pese
al detalle de que todos son medianamente conocidos para la mayoría, cumplen
bien cada uno con su rol y aportan la naturalidad necesaria para que la
historia funcione. No és difícil creer que son una familia.
Puntos
positivos: Como experimento voyerista está muy conseguido, tiene una perspectiva
algo diferente a otros títulos y transmite naturalidad de principio a fin, algo
indispensable para que un found footage
funcione. Las apariciones y actos del acosador aunque son contados y se hacen
bastante de rogar están bien hechos, impactan y acojonan sin necesidad de
golpes de efecto ni de situaciones realmente rebuscadas. La simple sensación de
que pudiera pasarte algo parecido ya da suficiente mal rollo como para que la
sugestión haga el resto.
Puntos
negativos: Como película es bastante cansina y monótona, si no eres demasiado dado
a los reality y a ver el día a día de
otras personas seguramente te acabará agotando y la espera hasta que ocurre
algo es bastante larga. Además una vez llega, ocurre tan rápido y de una forma
tan cotidiana (por mal que suene) que apenas da tiempo a asimilarlo. Los
actores pese a realizar un buen trabajo son caras conocidas en mayor o menor
medida, lo que le puede restar puntos de credibilidad para los más exigentes.
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