EL ÚLTIMO BLOG A LA IZQUIERDA... DE SITGES - BOYS IN THE TREES

AUSTRALIA, 2016

TÍTULO ORIGINAL: Boys in the Trees
DIRECTOR: Nicholas Verso
PRODUCTOR: John Molloy, Bethany Jones, Sandy Cameron
GUIÓN: Nicholas Verso
REPARTO: Toby Wallace, Gulliver McGrath, Mitzi Ruhlmann

DURACIÓN: 112 minutos

WEB: http://www.boysinthetrees.com.au/
IMDB: http://www.imdb.com/title/tt3445580/

VALORACIÓN: 7/10


CUENTO DE HALLOWEEN

“La noche de Halloween de 1997 supone también el último día de instituto de Corey, Jango y su banda de skaters. Cuando Corey encuentre a Jonah, una antigua amistad a la que Jango tiene atemorizada, los dos caminarán, mientras la noche cae, y los recuerdos emergen, destapando los fantasmas del pasado y gestando una cinta encantadora, aterradora y entrañable.”

La última sorpresa proveniente de Australia que nos trajo la cincuentena edición del Festival de Sitges tras Hounds of Love y Killing Ground fue la notable Boys in the Trees del director novel Nicholas Verso.

El film nos traslada a finales de los noventa, más concretamente al 31 de octubre de 1997, la noche de Halloween, la noche del deleite de la tumba. Un grupo de matones preadolescentes aprovecha para salir a hacer el gamberro por el pueblo, pero Corey acaba algo saturado de sus amigos y decide marchar antes de que acabe la noche. En su camino se encuentra con Jonah, un antiguo amigo del que actualmente reniega y humilla en compañía de su manada.

Jonah propone a Corey rememorar un antiguo juego que consistía en ir juntos a casa mientras imaginaban diferentes historias que solo acabarían al llegar cada uno a su hogar. De esta manera comienza un onírico viaje repleto de historias que sacaran a relucir sus miedos y comenzaran a reforzar una amistad que parecía extinguida.

Boys in the Trees no es una película de terror, es un drama preadolescente con algún elemento sobrenatural que ayuda a enfatizar aspectos por los que suelen pasar los jóvenes inadaptados como suelen ser abusos, soledad o rechazo. Por otro lado también existe un prisma positivo en el que se nos muestra reconciliación, amistad, ambición o amor.

El viaje que emprendemos con Corey y Jonah es pausado, poco a poco iremos conociéndoles, descubriendo sus preocupaciones y que es lo que sucedió con su amistad. Pese a que es posible que descubráis antes de tiempo la gran sorpresa que se guarda para el final, el film no deja de perder interés en ningún momento y sigue hilvanando su historia hasta dar a conocer lo obvio.

Visualmente estamos ante una obra con una estética muy cuidada, una banda sonora muy de los noventa con temas fácilmente reconocibles y algún que otro momento videoclipero acompañado de piezas de metal industrial de Marilyn Manson y Rammstein.