ESTADOS UNIDOS, CANADÁ,2012
TÍTULO ORIGINAL: The Possession
DIRECTOR: Ole Bornedal
PRODUCTOR: Sam Raimi, J.R.Young
GUION: Juliet Snowden, Stiles White
REPARTO: Natasha Calis, Jeffrey Morgan, Kyra Sedgwick
DURACIÓN: 92 minutos
VALORACIÓN: 5.75/10
UN ACEPTABLE CONJUNTO DE TÓPICOS
Siendo sincero, nunca he sido un fan del cine
de posesiones, espíritus o exorcismos y quitando un par de títulos
(El Exorcista, El
Exorcismo de Emily Rose o la no tan conocida, La Possesion de Emma Evans por
decir algunos) pocos films de este
género han llegado a gustarme ni mucho menos asustarme. Si decidí darle una
oportunidad a The Possession a pesar
de no ser mucho mi estilo, fue simplemente por el hecho de ver el nombre de Sam Raimi metido en el proyecto, aunque
después descubrí que solo como productor de la cinta.
Mis expectativas con ella eran muy bajas (la
coletilla "el origen del mal" o
"basada en hechos reales" tienen
parte de culpa) por lo que es posible que mi opinión sea un poco más positiva
con el film de lo que debería. La verdad es que no me ha parecido una pérdida
total de tiempo (que era lo que esperaba), y aunque tiene muchos errores y el
conjunto en general queda algo simple, no me ha parecido mala. Tampoco se me
hizo aburrida (casi diría que se me hizo corta) y como entretenimiento para una
noche de cine casero y no darle al coco va perfecta.
La
trama, como suele ser habitual en este tipo de películas, no se complica mucho;
una niña compra una antigua caja de madera en un rastrillo y empieza a
obsesionarse (de manera bastante insana además) con ella, algo que sus padres
(separados) en principio no ven como algo alarmante. Pero cuando notan que su
hija cada vez está más extraña y hasta agresiva, se dan cuenta de que ocurre
algo mucho más serio de lo que parecía. Como veis la originalidad ya no es algo
que se busque en el cine de terror, porque es casi imposible inventar algo
nuevo hoy en día donde se ha visto todo. Con esto quiero decir que encontrareis
todos y cada uno de los clichés de los films de posesiones: niñas en camisón,
pelo grasiento en la cara, ojos en blanco, gritos, ataques de histeria y
movimientos imposibles por parte de la posesa.
Tambien
encontramos otro elemento tipico, un objeto antiguo maltido (en este caso una
caja de madera) de la que no sabemos mucho, pero lo suficiente para no querer
tocarla. No creo que en ningún momento
llegue a asustar, pero si mantiene cierta tensión en algunas escenas y tiene
otras que aunque estén ya algo trilladas o muy vistas, no dejan de estar bien
rodadas.
El mayor defecto que
le he encontrado a The Possession, es lo que acabo de nombrar: todo está
demasiado visto. Estamos ante un film que aunque cumple correctamente su
función de entretenimiento, no arriesga ni aporta nada nuevo al género de las
posesiones, simplemente utiliza la formula ya conocida por todos y la recicla
una vez más. Tampoco ayudan mucho los momentos metidos simplemente de relleno
(las peleas de los padres, etc.) que solo sirven para que durante unos minutos,
perdamos el interés que pudiéramos tener en la película.
Pero si en mi opinión (a pesar de contar que
estos y otros fallos), se merece un aprobado, es primero porque aunque las
escenas tensas no sean nada novedosas, si cumplen con el requisito de mantener
cierto suspense, y segundo, por la más que correcta actuación de Natasha Calis como Em, la niña poseída. Aunque no consiguió asustarme del todo, si me
incomodo varias veces con las miradas que le echa a la cámara, además el
progreso de cambio que sufre esta bastante bien definido (quizá es lo único
bien definido en todo el film) y gracias a ello se mantuvo mi interés por
continuar viéndola, sin ella, aunque no suelo hacerlo nunca, es posible que la
hubiera parado a la mitad. A pesar de que es Natasha la que más destaca en mi opinión, tampoco se queda atrás su
compañera, Madison Davenport en el
papel de Hanna, su hermana mayor. No
puedo decir lo mismo de los adultos, la mayoría con personajes demasiado planos
y sin miga, además de aportar bastantes incoherencias a la historia y algunos
(sobre todo, el padre de las niñas) con actitudes nada realistas. Tampoco
encontraremos un final para tirar cohetes, para que os voy a engañar, simplemente
cumple en proporción al resto de la cinta y como viene siendo habitual, deja
puerta abierta a una secuela.
Para contrarrestar el hecho de que la trama
sea bastante simple y los clichés se repitan una y otra vez, puedo decir que
los efectos especiales son decentes la mayoría de veces (aunque al final canten
un poco mas y le resten impacto a la situación), al igual que la fotografía y
la ambientación en las escenas más tensas. Tampoco esperéis una gran cantidad
de sangre ni escenas desagradables, porque aunque si hay un par de ataques algo
más salvajes por encima del resto, la mayoría de las muertes son bastante
rápidas y sencillas.
Si repasamos un poco sus virtudes y sus defectos,
The Possession es un film de terror
de lo más comercial y simplón, pero que aun así creo que se merece un suficiente.
La cinta consigue su función básica de entretener durante los noventa minutos
que dura y además despierta cierto interés ver la evolución del personaje de Emily, por lo que no llegue a pensar
que había perdido el tiempo del todo con ella. Eso sí, si le echáis un ojo, recomiendo
que sea sin ganas de ver algo innovador o sorprendente, porque esta película es
un refrito de clichés que poco o nada nuevo puede enseñarte sobre el género.
Como ya he dicho un poco más arriba, para ver sin darle demasiadas vueltas y
sin mas intención que pasar un rato medianamente entretenido.
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