GUERRA MUNDIAL Z

ESTADOS UNIDOS, 2013

TÍTULO ORIGINAL: World War Z

DIRECTOR: Marc Foster

PRODUCTOR: Ian Bryce, Brad Pitt, Dede Gardner, Jeremy Kleiner

GUIÓN: M.M.Carnahan, Drew Goddard, Damon Lindelof

REPARTO: Brad Pitt, Mireille Enos, Fana Mokoena

DURACIÓN: 116 minutos

WEB: http://www.guerramundialz.es/

IMDB: http://www.imdb.com/title/tt0816711/

VALORACIÓN: 6/10

ZOMBIES COMERCIALES PARA TODOS LOS PÚBLICOS

Que complicado resulta afrontar el visionado de una película cuando has leído el libro o novela en la que está basado y este último te pareció una maravilla. Aunque intentes evitarlo las comparaciones son odiosas y tu mente no para de buscar los símiles y sentirse identificado con aquellas letras que tanto consiguieron transmitirle.

Desde el momento en que se anunció el rodaje de Guerra Mundial Z sabía que era imposible plasmar la novela en la gran pantalla, y conforme se anunciaba reparto y filtraban las primeras imágenes cada vez tenía más claro que nada o prácticamente nada tendría que ver esta adaptación cinematográfica con la novela de Max Brooks.

 

Y es que Guerra Mundial Z (la película) deja de lado todas las subtramas políticas, sociales, religiosas, psicológicas o farmacéuticas que nos narraba la obra de Brooks para ofrecernos una trepidante película en la que prima la acción sobre todo lo demás, estamos delante de la gran super producción del cine de zombies, un film de muertos vivientes llevado a su máximo esplendor comercial.

Brad Pitt encarna el papel de Jerry Lane, un ex agente de las Naciones Unidas que se ve obligado a sumergirse en una investigación para dar con el paciente cero, encontrar el origen de este súbdito apocalipsis que ha asolado a la tierra e intentar  descubrir una posible cura. Y porque se ve obligado, porque si no su mujer y sus hijas no podrán estar a salvo a borde de un portaaviones del gobierno y les dejaran en un campo de refugiados… ¡Viva el recurso sentimental fácil!

En su misión recorrerá diferentes países del mundo buscando una respuesta a todo lo que esta sucediendo y obteniendo información valiosa que le hará dar vueltas por los cinco continentes como si de ir a la vuelta de la esquina se tratara, y es que el amigo Pitt ira de Estados Unidos a Europa pasando por Asia y África en medio de un apocalipsis zombie global con la facilidad del que coge su bonobus y se sube al bus para ir al trabajo.

Sus estancias en los diferentes escenarios donde se desarrolla la película siguen un mismo patrón: una primera toma de contacto con el lugar, charla con algún personaje que le dará una información valiosa, a continuación estalla el caos y la acción trepidante y por último encuentra la forma de salir del lugar. Todo ello de una manera bastante previsible siguiendo los cánones del buen blockbuster para toda la familia.

Los responsables de toda esta trama son como ya hemos dicho anteriormente los zombies, pero no unos zombies cualquiera, se trata de unos zombies que corren que se las pelan, una versión exagerada de los infectados de 28 Días Después, algo así como Usain Bolt hasta las cejas de productos dopantes y que si los pones en una pista de despegue estoy seguro que romperían la barrera del sonido y se elevarían del suelo en un armonioso vuelo.

Está claro que en este aspecto yo soy un clasista, un old school fanático de los zombies de Romero, esos muertos vivientes en estado de putrefacción que se mueven de forma lenta y torpe y que conseguían atemorizar realmente al espectador. Tampoco reniego de los “zombies que corren” ya que los hemos podido ver en grandes películas como el remake de El Amanecer de los Muertos o en la francesa La Horde, pero en este caso se han pasado de revoluciones y nos encontramos con unos zombies que hacen parkour a una velocidad vertiginosa o que se suben unos encima de otros para traspasar un muro con un arte que ni los Castellers de Vilafranca.

A todo esto la película avanza con un ritmo que no decae en ningún momento y que sin duda contentara a los aficionados a las grandes superproducciones cinematográficas, ya que prácticamente cumple con todos y cada uno de sus clichés, desencadenando en un final heroico pero sin ningún tipo de fuerza y que te deja con la sensación de que se podrían a ver guardado algún fuego de artificio para el desenlace.

Los efectos especiales y las escenas de acción resultan realmente espectaculares, aunque el abuso de planos generales o panorámicos hace que la tensión escasee, a excepción de un par de sobresaltos bien orquestados. Por otro lado se hecha muchísimo de menos la sangre, que a excepción de unas gotas en el bello rostro del señor Brad Pitt escasea durante toda la película, algo que por otro lado era de esperar ya que se trata de un producto destinado a las masas, no sea que nos encontremos con algún homofóbico en la sala que se pueda sentir molesto.

Un aspecto destacado del film es su excelente banda sonora, en la que destaca sobremanera la pieza Isolated System compuesta por la banda británica Muse y que se puede escuchar en diversas ocasiones a lo largo de la película.

En definitiva, Guerra Mundial Z es una megaproduccion que hará las delicias de los aficionados al cine de catástrofes y de acción trepidante y que sin duda se va a convertir en uno de los grandes éxitos de taquilla de este año, pero por el contario puede suponer una decepción para los aficionados al género zombie más puristas y que esperaban algo más fiel a la novela en la que se inspira el film.