Llegamos al ecuador del festival, es lunes y decidimos no perder los buenos hábitos, por lo que madrugamos como cualquier otro inicio de semana aunque en esta ocasión con la intención de ver el primer pase de una de las películas mas esperadas de esta edición; The Yellow Sea.
El director Na Hong-jin consiguió alzarse con el premio Orient Express en Sitges 2008 con su opera prima, The Chaser. Ahora vuelve para presentar su segunda obra tras pasearla con mucho éxito en el pasado festival de Cannes.
Gu-nam malvive en China trabajando como taxista e intentando reunir el dinero suficiente para saldar la deuda que contrajo con unos mafiosos locales que enviaron a su mujer de vuelta a Corea del Sur a cambio del pago de 60.000 yuanes.
Ante la imposibilidad de reunir dicha cantidad decide aceptar un trabajo para una de las mafias mas importantes de la zona: le enviaran ilegalmente a Corea para que cometa un asesinato y a cambio le pagaran el dinero suficiente para que zanje su deuda, además de la posibilidad de intentar contactar con su mujer de la que hace seis meses que no tiene ninguna noticia.
Una vez en Corea todo se complica y Gu-Nam se convierte en objetivo primordial de la policía, la mafia coreana y la mafia china, derivando todo ello en espectaculares y trepidantes persecuciones repletas de sangre y violencia.
Como en la mayoría de thrillers coreanos el uso de armas de fuego es prácticamente inexistente, pero a cambio podemos disfrutar de un amplio abanico de cuchillos, machetes, hachas y martillos que abrirán múltiples heridas en todos los protagonistas, dejándonos la sensación que algunos de ellos son inmunes a las armas blancas.
The Yellow Sea presenta un argumento muy elaborado y que nos depara mas de una sorpresa durante sus 140 minutos de metraje. Acción trepidante, coreografías sangrientas y potencia visual; la mejor forma de empezar el día.
Volvemos al auditori para ver otra de las películas que componen la secció oficial fantàstic competició y de la cual teníamos muy poco información; Bellflower.
Se trata de la opera prima del norteamericano Evan Glodell, que además se ha encargado del guion, producción, montaje y de interpretar de manera brillante al protagonista del film.
Nada mas empezar Bellflower sabemos que algo malo va a pasar, y es que no puede salir nada bueno de la relación entre un fanático de Mad Max que con la ayuda de un amigo está preparando su arsenal de supervivencia para el apocalipsis y una joven que mata el tiempo comiendo grillos vivos e ingiriendo litros y litros de alcohol.
Sobre su argumento no vamos a dar mas pistas ya que para nosotros ha sido toda una experiencia ir descubriendo poco a poco la película y recomendamos verla sin tener demasiadas referencias.
Bellflower destaca por su estética indie que podríamos encuadrar dentro del movimiento mumblecore y nos ofrece un film con personajes perfectamente definidos y en el que experimentaremos sensaciones extremas que van desde el amor al odio pasando por la amistad, la misoginia, la depresión y la locura.
Hasta ahora la sorpresa mas grata de todo el festival, un film con un climax espectacular y que sin duda dará mucho que hablar.
El uso del 3D en el cine se está volviendo abusivo e innecesario en muchos casos, y un claro ejemplo de ello es la coproducción británico americana The Mortician, película que no posee ni un solo efecto destacable que justifique el uso de las incomodas gafas tridimensionales.
Sorteando este primer obstáculo nos encontramos un film que se queda a medio camino entre novela negra y el drama de telefilm de sobremesa.
Un solitario hombre pasa sus días entre su trabajo en la morgue, su afición a la taxidermia y sus visitas a prostitutas, todo ello en un deprimente ambiente de gueto estadounidense.
Esta monotonía cambiara en el momento en que llegue el cadáver de una chica con un misterioso tatuaje y aparezcan diferentes personajes relacionados con su muerte que le involucraran de pleno en la trama.
Historia muy sencilla y ya vista en numerosas ocasiones que consigue salvarse por mantener un buen ritmo y una duración no superior a la hora y media.
Jaume Balagueró y Sitges es una combinación que tiene el éxito asegurado y lo pudimos comprobar en un Retiro lleno hasta la bandera para disfrutar del último pase de su esperadísima última obra, Mientras Duermes.
Balagueró ha dejado de lado la película de susto fácil que nos tenía acostumbrados últimamente y nos ofrece un intenso thriller psicológico que explora los límites de una mente retorcida incapaz de sentir la felicidad.
Apoyada en las brillantes actuaciones de sus dos protagonistas, Luis Tosar y Marta Etura, nos cuenta la historia de Cesar, un conserje que pone todo su empeño en destrozar la felicidad delos que le rodean.
Como todo gran villano que se precie, Cesar tiene que luchar contra un duro rival; Clara una joven a la que parece imposible borrarle la sonrisa de la cara.
Con esta premisa y por el título del film os podéis hacer una idea de cuáles serán los derroteros por los que ira evolucionando esta enfermiza historia.
Mientras Duermes es posiblemente la película mas completa que ha rodado hasta la fecha Jaume Balagueró y sin duda se va a convertir en uno de los grandes éxitos de taquilla nacionales de este año.
Y de esta brillante forma cerramos un gran día que nos ha servido para retomarle el pulso al festival tras la aciaga jornada del domingo.
Veo, mejor dicho leo, que Mientras Duermes te ha gustado, interpreto. ;)
ResponderEliminarBuenas Machete!!
ResponderEliminarPues sí, coincido plenamente con tu análisis de la película, mas adelante hablare de ella como es debido.
Saludos!!